Caso Stormy Daniels, uno de los 34 delitos menos grave imputado a Donald Trump y luego que un juez de origen colombiano, Juan Merchán, le inculpó de 34 cargos de “falsificación de registros comerciales en primer grado” por el pago de 130.000 dólares a la estrella porno en la campaña electoral de 2016.
Así lo dijo el fiscal Alvin Bragg, quién expresó que “no se pueden normalizar conductas criminales graves” y que “todo el mundo es igual ante la ley”.
La corte penal dejó en libertad a Trump, que podría tener que sentarse en el banquillo a partir de enero de 2024, convirtiéndose en el primer exmandatario sometido a un juicio de consecuencias imprevisibles para sus aspiraciones de volver a la Casa Blanca.
Por qué se lo investiga a Trump:
El caso Daniels es solo una de las investigaciones que amenazan al expresidente, bajo escrutinio por presionar a funcionarios para anular la victoria de Biden en 2020, y con una llamada telefónica grabada en la que pedía al secretario de Estado “encontrar” suficientes votos para revertir el resultado.
También es investigado por su posible papel en el asalto del 6 de enero de 2021 al Capitolio en Washington, así como por el manejo y custodia de documentos clasificados tras dejar la Casa Blanca.
En el caso de la actriz porno, Michael Cohen, fue el encargado de hacer el pago a la actriz porno y quiénreembolsó la suma fraccionada, presuntamente haciéndola pasar como servicios profesionales.
Todo esto no sería obstáculo para que Trump haga campaña y siga adelante con su sueño de ser otra vez presidente de los Estados Unidos.
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El juicio podría empezar en enero:
El juez Merchán dijo que el juicio podría comenzar en enero próximo. Los abogados de Trump prefieren que sea en la primavera de Estados Unidos, entre marzo y junio.
“La acusación en sí misma es un texto repetitivo”, dijo uno de sus abogados, Todd Blanche, y agregó que se trata de una “triste” imputación.
Blanche agregó “No se alega ningún delito federal, ni que se haya cometido (delito) contra ninguna ley estatal. No alega cuál es la declaración falsificada. Es realmente decepcionante, es triste y vamos a luchar contra él”.
Tanto el expresidente como sus abogados han insistido en el despropósito de la causa. Trump no cesa de gritar que es una “caza de brujas”.
Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, no se ha referido al tema y ante la pregunta que le hizo un periodista le dijo solo se limito a sonreír.
La Casa Blanca ha intentado mantenerse en un segundo plano en el caso contra Trump.
