Ucrania confía en la posibilidad de lograr la paz y advirtió que se mantiene escépticos frente a lo que se logre en esta que sería una luz de esperanza para terminar el conflicto bélico que arrancó el pasado 24 de febrero luego que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenara invadir a Ucrania.
Luego que Putin amenazara con el uso de armas nucleares se abrió una nueva puerta y es la de una salida negociada para frenar los bombardeos ucranianos contra los civiles de Donetsk y Lugansk.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, dijo estár dispuesto a hablar en la frontera con Bielorrusia y luego que recibiera una llamada del presidente Lukashenko, principal aliado Putin.
«No hay nada malo en las mismas negociaciones. Si el resultado de las conversaciones es la paz, es necesario saludarlo», dijo en un discurso el canciller ucraniano, Dmitri Kuleba.
Agregó el canciller ucraniano que «No capitulemos, no cederemos ni un centímetro de territorio, no es el objetivo de nuestra lucha».
Este domingo, una delegación de Rusia llegó a la ciudad bielorrusa de Gómel, situada a unos 30 kilómetros de la frontera entre Bielorrusia y Ucrania, para sostener conversaciones con Kiev.
Kiev previamente pidió a Rusia celebrar negociaciones después del inicio de una operación especial rusa




