El plan piloto de convenios solidarios para el embellecimiento de fachadas en instituciones educativas del Tolima llegó a su término con resultados positivos, beneficiando a siete escuelas del departamento. Este proyecto se desarrolló bajo un enfoque participativo, en el cual las Juntas de Acción Comunal (JAC) lideraron la ejecución de las obras con recursos gestionados específicamente para este propósito.
El modelo permitió a las comunidades involucrarse activamente en el proceso, desde la planificación hasta la ejecución. Las JAC asumieron la responsabilidad de gestionar los materiales, coordinar la mano de obra y supervisar los trabajos, con el acompañamiento de técnicos y profesionales. Esto no solo generó mejoras visibles en la infraestructura escolar, sino que también fortaleció la cohesión y el sentido de pertenencia comunitario.
Estas iniciativas de arte transforman las instituciones educativas.



“Este programa es una muestra del impacto que tiene la colaboración entre las comunidades y las JAC, logrando resultados tangibles en las instituciones educativas y fomentando el trabajo colectivo”, señaló Jesús Alberto Saavedra Barrios, quien destacó la importancia de continuar replicando este modelo en más regiones del departamento.

Los líderes comunales expresaron su satisfacción por el impacto del proyecto. Según Maribel Ortiz Alape, presidenta de una JAC participante, este tipo de iniciativas transforman las escuelas en espacios más agradables y dignos para niños y jóvenes, destacando que “hacía mucho tiempo no se veía un trabajo de esta magnitud en las instituciones educativas”.
De igual manera, Yuri Varón, otra líder comunitaria, resaltó que el esfuerzo conjunto no solo renovó las fachadas, sino que también fortaleció los lazos sociales. “Hoy nuestras escuelas lucen mejor que nunca, lo que nos llena de orgullo como comunidad y nos motiva a seguir participando en proyectos de este tipo”, expresó.
El plan piloto no solo marcó un precedente en la gestión de obras comunitarias, sino que también dejó en evidencia el potencial de las comunidades cuando trabajan unidas. Se espera que esta experiencia sirva como base para futuras iniciativas que busquen impactar positivamente en más instituciones y sectores del Tolima.
