Nuevamente la delincuencia dice presente en la capital. En las últimas hora se conoció el caso de un taxista que fue víctima de un violento atraco en el noroccidente de la capital, cuando se desplazaba a bordo de un vehículo y en compañía de dos falsos pasajeros.
El atraco sucedió el pasado lunes, alrededor de las 4:30 am, según cuenta la víctima, el hombre recogió a los pasajeros en Suba La Gaitana, cuando iban por el sector de Suba Salitre, los hombres empiezan a desviarlo por cuadras oscuras para recoger a otra persona, en ese instante, el taxista se niega y los delincuente lo atacan con un cuchillo.
“Yo los recojo y como a 10 minutos del trayecto, me empezaron a meter por cuadras destapadas, cuando me dicen que entrara a la izquierda, a la cuadra cerrada, yo les dije que no iba a ir allá. En ese momento, sacó un cuchillo y me lo ‘sampa’ aquí en el cuello”, contó la víctima.
Luego de esto, el taxista logró sacar al primer sujeto del vehículo y continuó intentando defenderse del otro que quedaba en el taxi, quien lo agredió con el arma blanca en cuatro oportunidades.
“Al seguir andando, el otro queda forcejeando conmigo, ahí fue cuando me metió la puñalada en la mano, la cara y otras en la cabeza. Él se baja, yo cierro la puerta de atrás, se dio la vuelta y en la parte del conductor del vidrio me sigue lanzando el cuchillo y a tratar de hurtarme las cosas”, relató el afectado,
En esta ocasión la víctima de la delincuencia fue Fernando Zabala, taxista de profesión, quien resultó con múltiples heridas en su cabeza, cara, cuello y manos. El afectado logró comunicarse con colegas para pedir ayuda y ser trasladado a un centro médico, donde fue atendido, le cogieron 15 puntos y se encuentra fuera de peligro.
En este caso eran dos los delincuentes que, con armas blancas, intimidaron y atacaron al taxista. Los ladrones escaparon del lugar sin ser identificados y están siendo buscados por la Policía.
Los taxistas le piden a las autoridades un mayor acompañamiento, especialmente, en las noches y madrugadas, horas en donde los delincuentes aprovechan de la oscuridad para atacarlos.