En Villavicencio, un grupo de mujeres que laboraron como manipuladoras del Plan de Alimentación Escolar (PAE) enfrenta una situación crítica debido al incumplimiento en el pago de sus liquidaciones. Desde noviembre de 2024, estas trabajadoras, que desempeñaron un papel fundamental en la preparación de alimentos para miles de estudiantes, no han recibido la totalidad de los pagos que les corresponden.
Sin respuesta
Joana, una de las trabajadoras afectadas, relató: “Salimos el 26 de noviembre y hasta la fecha no nos han cancelado la totalidad de nuestro contrato. Algunas compañeras entraron hace dos o tres meses, incluso hubo contrataciones de ocho o quince días. A todas nos deben algo”.
La cifra total de afectadas asciende a aproximadamente 300 manipuladoras, en su mayoría madres cabeza de hogar, quienes no solo enfrentan esta deuda económica, sino también amenazas de perder futuros empleos si reclaman sus derechos. “Muchas tienen miedo de hablar porque temen represalias”, agregó Joana.
Incumplimientos
El secretario de Educación de Villavicencio, William Zárate, había prometido que los pagos pendientes se harían antes de finalizar 2024, compromiso que no se cumplió. Franci Patiño, otra de las afectadas, expresó: “Hicimos presión el 24 de diciembre y logramos que nos pagaran la prima, pero la liquidación sigue pendiente. Nos prometieron el pago el 27, luego el 30, y hasta hoy, 7 de enero, seguimos sin recibir respuesta”.
Según las trabajadoras, la empresa contratista responsable de sus contratos, no ha dado explicaciones claras sobre el retraso. “El dueño de la empresa, Freddy, no responde nuestras llamadas. Solo pedimos que nos dé una fecha exacta para recibir lo que ya trabajamos y nos ganamos. No es justo que calienten el dinero mientras tenemos obligaciones que cumplir”, denunció Franci.
Impacto
La falta de pago ha generado graves problemas económicos para las manipuladoras. Joana señaló que ha tenido que recurrir a préstamos informales, conocidos como “gota a gota”, para pagar servicios básicos y evitar ser desalojada de su vivienda. “Tuve que pagar intereses altos porque no puedo quedarme sin techo. Es injusto que quienes trabajamos con esfuerzo tengamos que pasar por esto”, afirmó con indignación.
Además del caso de las manipuladoras, Rojas señaló retrasos en la emisión de facturas de impuestos prediales correspondientes a 2025, lo que afecta a propietarios que necesitan cumplir con sus obligaciones tributarias.
El llamado de estas trabajadoras es claro: recibir el pago de sus liquidaciones lo antes posible. “Solo pedimos lo que nos ganamos. Que el alcalde y la Secretaría de Educación se pronuncien y obliguen a la empresa a cumplir con sus responsabilidades”, puntualizó Franci.




