Villavicencio: Se robaba la «Platica»

[responsivevoice_button voice="Spanish Latin American Male" buttontext="Escuchar Noticia"]
Compartir en

En un operativo conjunto de las autoridades judiciales, fue capturada Sonia Paola Montoya Narváez, una mujer de 40 años, señalada de ser la presunta autora de una serie de estafas agravadas ocurridas entre 2018 y 2022. La captura, realizada en las últimas horas, tiene su origen en denuncias formales interpuestas por más de siete personas que habrían sido víctimas de un fraude en el que la mujer, en calidad de representante legal de la Sociedad de Inversiones San Joaquín S.A.S. y propietaria de un concesionario automotriz en Villavicencio, engañó a sus víctimas en la venta de vehículos que nunca entregó.

Investigación

La fiscalía general de la Nación, tras una exhaustiva investigación, documentó un total de siete denuncias en las que los afectados acusaron a Montoya Narváez de recibir grandes sumas de dinero a cambio de la promesa de entregar automóviles, pero nunca cumplir con su compromiso. El monto total de las estafas ascendió a la suma de $297.300.000 millones, una cifra considerable que subraya la magnitud de la presunta actividad delictiva llevada a cabo por la detenida.

Según las investigaciones, Sonia Paola Montoya Narváez operaba desde su establecimiento comercial, un concesionario automotriz denominado Llanocar, ubicado en el centro de Villavicencio. Allí, ofrecía vehículos a precios aparentemente atractivos y firmaba contratos con las víctimas, quienes realizaban pagos anticipados por los autos que supuestamente iban a recibir en un plazo determinado. Sin embargo, tras recibir las sumas de dinero, Montoya no entregaba los vehículos acordados y no respondía a los reclamos de sus clientes. En muchos casos, las víctimas nunca recibieron ni los carros ni la devolución de su dinero, lo que generó una ola de denuncias en su contra.

Fiscalía

De acuerdo con la Fiscalía, las víctimas eran engañadas mediante documentos falsificados, y en varios casos, Montoya lograba hacer creer a los compradores que los vehículos se encontraban en proceso de legalización o entrega, retrasando indefinidamente los plazos para finalmente desentenderse por completo. En otras ocasiones, los compradores nunca recibieron el vehículo, y la acusada los ignoraba cuando intentaban comunicarse para obtener respuestas sobre sus pagos.

En la audiencia preliminar, la Fiscalía presentó las evidencias de la estafa, que incluyen testimonios de las víctimas, documentos falsificados y registros bancarios que demuestran las transacciones realizadas por Montoya. La mujer fue imputada por el delito de estafa agravada, pero no aceptó los cargos. El juez de control de garantías decidió imponerle medida de aseguramiento en establecimiento carcelario mientras continúa el proceso judicial en su contra.


Compartir en