El alcalde de Villavicencio, Alexander Baquero, anunció que la ciudad no se sumaría al día cívico decretado por el presidente Gustavo Petro para el 18 de marzo. Baquero argumentó que la educación y los servicios administrativos de la ciudad no debían verse interrumpidos por “discusiones políticas nacionales que siguen polarizando a nuestra sociedad”.
Decisión
Esta decisión alineó a Villavicencio con Medellín, donde el alcalde Federico Gutiérrez también rechazó la medida presidencial, garantizando la continuidad de las actividades en la capital antioqueña. La postura de Baquero subrayó la prioridad de mantener la normalidad en los servicios esenciales, en contraposición al llamado del gobierno nacional.
A nivel nacional, la decisión de Villavicencio y Medellín de no sumarse al día cívico decretado por el presidente Petro evidenció las diferencias de criterio entre las administraciones municipales y el Gobierno Nacional. Esta situación puso de manifiesto la necesidad de fortalecer el diálogo entre las distintas instancias de gobierno para garantizar que las decisiones de carácter nacional consideren las particularidades y necesidades de cada región.
Decreto
La postura de Villavicencio frente al día cívico decretado por el presidente Petro abrió un espacio de reflexión sobre la relación entre las políticas nacionales y las realidades locales. Este caso evidenció la importancia de considerar las particularidades de cada región al momento de implementar medidas de alcance nacional y resaltó la necesidad de promover un diálogo más fluido entre el gobierno central y las administraciones municipales.
En conclusión, la decisión del alcalde Alexander Baquero de no sumarse al día cívico decretado por el presidente Gustavo Petro reflejó una postura centrada en la continuidad de los servicios esenciales y el bienestar de la comunidad de Villavicencio. Esta determinación generó diversas reacciones entre la ciudadanía y los sectores políticos, evidenciando la complejidad de equilibrar las iniciativas nacionales con las necesidades y prioridades locales. El caso de Villavicencio subrayó la importancia de fortalecer el diálogo y la colaboración entre las distintas instancias de gobierno para construir consensos que beneficien a toda la sociedad.




