Ana Claudia García, madre de tres niños de entre 6 y 8 años, enfrenta una tragedia que ha marcado su vida y la de su familia. Un voraz incendio consumió por completo la vivienda arrendada donde residían, en el barrio Nueva Colombia 2, dejando a la familia sin hogar y con lo puesto. Por fortuna, la mujer y sus hijos no se encontraban en la casa al momento del incendio, lo que evitó que la tragedia fuera aún mayor.
Hechos
De acuerdo con las primeras investigaciones y testimonios de los vecinos, el incendio se originó debido a un corto circuito, que, aparentemente, fue lo que desencadenó el fuego cerca de la cama donde comenzó la conflagración. El incendio avanzó rápidamente, y, debido a la falta de recursos en el sector, las posibilidades de controlarlo fueron mínimas.
La comunidad intentó colaborar con lo que tenían a mano, pero los esfuerzos fueron insuficientes. En el sector no había suministro de agua en el momento, lo que dificultó aún más las labores de los vecinos que, en un intento por salvar lo que fuera posible, unieron sus esfuerzos. Una vecina fue la única que logró obtener el líquido vital utilizando un jagüey cercano. Sin embargo, la cantidad de agua disponible no fue suficiente para sofocar las llamas.
Auxilio
Cuando el Cuerpo de Bomberos finalmente llegó al lugar, ya era demasiado tarde. La vivienda, que era el hogar de Ana Claudia y sus tres hijos, se había reducido a escombros y cenizas. El incendio arrasó con todo lo que había en el interior, dejando a la familia en la más absoluta pobreza material.




