La comunidad del barrio Amarilo expresó su descontento ante la falta de presencia de la administración municipal en una reunión convocada para discutir la creciente problemática de seguridad en la zona. Los habitantes, quienes esperaban la asistencia de funcionarios clave, se encontraron con la inasistencia de casi todas las entidades invitadas, lo que generó molestia y un fuerte sentimiento de abandono.
Malestar
La reunión, que tenía como propósito abordar las preocupaciones de seguridad y urbanismo, contó únicamente con la presencia de un delegado de la Alta Consejería. Esta baja representación gubernamental dejó sin respuesta las inquietudes ciudadanas y aumentó la desconfianza de la comunidad en la gestión municipal.
Entre las entidades que debían asistir se encontraban la Secretaría de Movilidad, Infraestructura, Gobierno, Catastro, Espacio Público, Inspección de Policía de los sectores 7 y 8, el equipo de iluminación de Alborada, el despacho del alcalde y la Secretaría de Medio Ambiente. Sin embargo, ninguna de ellas envió representantes, lo que llevó a los ciudadanos a cuestionar el compromiso de la administración con los problemas del barrio. “¿Dónde estaban los funcionarios que no asistieron a la reunión y por qué no fueron?”, se preguntaron los asistentes, quienes consideran que la ausencia de las autoridades es una muestra de desinterés por la seguridad y bienestar del sector.
Problemática
Los habitantes de Amarilo han denunciado en reiteradas ocasiones la falta de iluminación en calles y parques, la presencia de puntos críticos de inseguridad y el deterioro del espacio público. La comunidad esperaba que la reunión sirviera para concretar compromisos y soluciones, pero la inasistencia de las autoridades ha dejado más dudas que respuestas. “La gente está cansada de promesas incumplidas. Necesitamos ver acciones concretas, no solo discursos”, manifestó uno de los líderes comunitarios.
Reprogramación
Ante la indignación generada, los habitantes exigen que la Alcaldía se pronuncie sobre lo ocurrido y explique las razones de la ausencia de los funcionarios. Además, solicitan la reprogramación de la reunión con la presencia de todas las entidades responsables, así como un plan de acción claro para atender las problemáticas del sector.
Por su parte, la comunidad ha anunciado que continuará organizándose y exigiendo respuestas. “No vamos a quedarnos callados. Queremos soluciones reales y exigimos que las autoridades cumplan con su deber”, señalaron los asistentes.
El barrio Amarilo espera que la administración municipal rectifique su postura y tome medidas inmediatas para recuperar la confianza de la comunidad. Entretanto, la incertidumbre y la sensación de abandono siguen latentes en los habitantes de este sector de Villavicencio.




