Un hecho que se está volviendo frecuente en la ciudad, volvió a encender las alarmas sobre la seguridad en la capital del Meta. Un hombre fue atrapado por la comunidad tras robar un celular en plena vía pública. Decenas de personas lo persiguieron, lo acorralaron y lo redujeron, dejándolo tendido en el suelo hasta la llegada de la Policía Nacional.
Este incidente refleja un creciente fenómeno de justicia por mano propia, en medio de la desesperación de los ciudadanos ante la ola de robos y la percepción de inseguridad. “Aquí estamos cansados. Los ladrones ya no le temen a nada y nadie hace nada por nosotros. Si los cogemos, les damos su merecido, porque si no, siguen haciendo de las suyas”, comentó un comerciante local que presenció el acto.
La seguridad, fuera de control
Este suceso ha revivido el debate sobre la capacidad de las autoridades locales para mantener la seguridad en Villavicencio. Muchos ciudadanos sostienen que la administración municipal ha fallado en su compromiso de mejorar la situación, dejando a la comunidad en un estado de abandono en temas de orden público.
“En cada campaña prometen que la seguridad va a ser su prioridad, pero no ha pasado nada. Los robos, los atracos, los asaltos son el pan de cada día, y la Policía no da abasto. Ya no sabemos qué hacer”, comentó otra residente del barrio, visiblemente frustrada. El descontento con la gestión de la seguridad por parte de la alcaldía es palpable, y crece la sensación de que la ciudad se les ha salido de las manos.
Varios líderes comunitarios han expresado sus inquietudes ante los medios y en reuniones con funcionarios públicos, advirtiendo que la situación está llegando a un punto crítico. “La gente está tomando la justicia por su cuenta porque no ve otra salida. Es muy grave, porque se puede salir de control y terminar en tragedias mayores”, declaró una vocera de una junta de acción comunal.
Una solución que no llega
Desde la Alcaldía de Villavicencio se han hecho algunos anuncios sobre iniciativas para reforzar la seguridad, como el aumento de efectivos policiales y el mejoramiento de la vigilancia con cámaras de seguridad. Sin embargo, los resultados no se han visto reflejados en una reducción de los índices de delincuencia.
La comunidad pide, además, acciones más concretas y efectivas que no solo se limiten a promesas o medidas temporales. “Nos prometen más policías, pero no los vemos. Nos prometen más cámaras, pero siguen robando en nuestras calles como si nada. Necesitamos que la Alcaldía cumpla de verdad”, afirmó otro habitante del sector afectado.
