La Policía Nacional llevó a cabo la captura de un hombre de 28 años en Villavicencio, quien fue acusado de abusar sexualmente de un niño de cinco años. Este individuo, que mantenía una relación cercana con la familia del menor, aprovechaba su confianza para someter al niño a diversos vejámenes sexuales cuando quedaba a su cuidado.
La operación se enmarca dentro de la estrategia de protección a la infancia y adolescencia, implementada por la Policía Nacional a través de la Seccional de Protección y Servicios Especiales de la Metropolitana de Villavicencio. En colaboración con la Fiscalía, las autoridades lograron ejecutar la captura mediante una orden judicial, destacando la importancia de la coordinación entre las instituciones para abordar este tipo de delitos.
Los hechos denunciados por la madre del menor revelaron que el abuso se había estado produciendo desde julio de 2023. Sin embargo, fue en septiembre de 2024 cuando el niño, tras un proceso de confianza y apoyo, decidió contarle a su madre lo que había estado sufriendo a manos del agresor. Este valiente acto de revelación permitió que se iniciara la investigación correspondiente y se tomaran las medidas necesarias para proteger al menor.
El hombre capturado fue puesto a disposición de las autoridades judiciales competentes, donde deberá enfrentar cargos por acceso carnal abusivo y actos sexuales con menor de 14 años. La justicia será la encargada de determinar su situación legal y las sanciones correspondientes a sus acciones.
El coronel Milton Andrés Melo González, comandante de la Policía Metropolitana de Villavicencio, hizo un llamado a la ciudadanía para que denuncie cualquier hecho delictivo o comportamiento que ponga en riesgo la vida e integridad física de los niños, niñas y adolescentes. Resaltó la importancia de rechazar cualquier conducta que vulnere los derechos de los menores, enfatizando que la protección de la infancia es una responsabilidad compartida entre la comunidad y las autoridades.
Este caso eleva las alertas sobre la necesidad de estar atentos a las señales de abuso y la importancia de crear un entorno seguro para los niños. La colaboración entre la familia, la comunidad y las instituciones es fundamental para prevenir y combatir la violencia sexual contra menores, asegurando que se escuchen sus voces y se protejan sus derechos.
Por último, las autoridades competentes expusieron las líneas habilitas para denunciar cualquier tipo de violencia contra menores de edad a través del 141 del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), canal de comunicación habilitado para reportar emergencias, denuncias y pedir orientación.
