un mes después de que saliera a la luz el informe sobre los abusos sexuales a menores por parte de miembros de la Iglesia católica en francesa, se conoció que los obispos franceses venderán “bienes” de sus diócesis o recurrirán a un préstamo para indemnizar a las víctimas de pederastia.
Así lo anunció Eric de Moulins-Beaufort, presidente de la Conferencia Episcopal Francesa, y quien descartó que estos recursos saldrían del bolsillo de los fieles.
Los prelados se comprometieron a “nutrir” el fondo de indemnización de las víctimas “desprendiéndose de los bienes inmuebles de la Conferencia Episcopal de Francia y de las diócesis”, dijo su presidente Éric de Moulins-Beaufort..
Al término de su reunión anual en el centro de peregrinación mariana de Lourdes, en el sur de Francia, los responsables diocesanos decidieron también “contraer un préstamo para anticipar las necesidades” si fuera necesario, agregó De Moulins-Beaufort.
La decisión, anunciada en rueda de prensa tras el encuentro, responde a una de las propuestas de la comisión independiente que estimó en más de 216.000 los casos de agresiones sexuales a menores por religiosos o sacerdotes entre 1950 y 2020.
Otra de las decisiones adoptadas es encargar a la jurista francesa Marie Derain de Vaucresson, exdefensora de menores, la constitución de una instancia nacional independiente de reconocimiento y reparación, que se encargará de instruir las demandas.
El viernes, los obispos franceses ya reconocieron la “responsabilidad institucional” de la Iglesia y la “dimensión sistémica” de estas agresiones, en la línea de lo propuesto por la Comisión Independiente sobre Abusos Sexuales en la Iglesia (Ciase).
Para financiar las indemnizaciones a las víctimas, llamó a descartar las donaciones de los fieles y hacerlo en cambio “a partir del patrimonio de los agresores y de la Iglesia de Francia”, u




