Un hombre de 67 años, identificado como Won Mo, fue acusado formalmente de terrorismo tras provocar un incendio en un tren de la línea 5 del metro de Seúl, Corea del Sur.
Según la investigación policial, el acusado habría actuado movido por resentimientos personales y una profunda frustración social, al sentirse marginado y desatendido por la sociedad y el gobierno. De acuerdo con reportes de medios surcoreanos como Yonhap News y The Korea Times, Won Mo enfrentaba un proceso de divorcio y que esto habría influido significativamente en su estado emocional y en su decisión de cometer el incendio.
Los hechos quedaron plasmados en un video de seguridad. Las imágenes muestran cuando Won Mo roció gasolina en el interior del vagón y prendió fuego con un encendedor, poniendo en riesgo la vida de casi 500 pasajeros que viajaban en ese momento.
El incidente ocurrió el pasado 31 de mayo, a las 8:42 de la mañana, cuando el tren se desplazaba entre las estaciones Yeouinaru y Mapo. Las llamas y el humo se propagaron rápidamente, generando escenas de pánico entre los pasajeros.
Gracias a la rápida reacción de los ocupantes, que activaron el freno de emergencia y usaron extintores, el incendio pudo ser controlado antes de que llegaran los bomberos. Seis personas resultaron heridas y 23 más fueron hospitalizadas por inhalación de humo, aunque no se reportaron víctimas mortales.
Testigos presenciales ofrecieron relatos conmovedores sobre lo sucedido. Una joven relató cómo una pasajera embarazada resbaló en la gasolina y perdió un zapato mientras huía, logrando escapar segundos antes de que las llamas se extendieran. Otro pasajero recordó: “Vi cómo algunos intentaban abrir las puertas y otros usaban extintores. El humo era tan denso que apenas podíamos respirar. Pensé que no saldríamos vivos, pero la reacción de todos fue clave”.
El proceso judicial contra Won Mo avanza bajo cargos de intento de asesinato, incendio premeditado en transporte público y violación de la ley de seguridad ferroviaria. La fiscalía subrayó que el acusado había planeado el ataque con antelación, adquiriendo gasolina y seleccionando cuidadosamente el tren y el horario para maximizar el impacto. Las autoridades recalcaron que la gravedad del acto, sumada a su intencionalidad, justifican la imputación de terrorismo.
