Cansados de los constantes robos y la falta de respuesta de las autoridades, los habitantes del barrio La Florida, en Engativá, han decidido organizarse y hacer turnos de vigilancia nocturna para protegerse. En los últimos meses, los atracos a transeúntes, viviendas y comercios han aumentado significativamente, mientras que la presencia policial sigue siendo insuficiente.
Además de la ola de robos, los vecinos denuncian un incremento en la presencia de habitantes de calle en la zona, lo que ha llevado a un aumento en el consumo de drogas en espacios públicos. Esta situación ha generado preocupación entre la comunidad, especialmente por la inseguridad que esto puede generar en parques y alrededores de colegios.
Con silbatos, linternas y radios, los vecinos recorren las calles en grupos y se comunican a través de WhatsApp para alertar sobre cualquier actividad sospechosa. Aunque esta iniciativa ha logrado disuadir a algunos delincuentes, los residentes insisten en que se necesita mayor apoyo de la Policía y estrategias efectivas para mejorar la seguridad en el sector.




