Valeria Afanador Cárdenas, una niña de 10 años con síndrome de Down, fue reportada como desaparecida el 12 de agosto de 2025 en la zona rural de Cajicá (Cundinamarca), tras salir del colegio Gimnasio Campestre Los Laureles. Cámaras de seguridad captaron a la menor cerca de una cerca viva que limita con el río Frío, desde donde ya no se registró su regreso.
Ante la ausencia de resultados, las autoridades desplegaron un operativo masivo que reunió a bomberos, rescatistas forestales, Ejército, Policía, unidades K9, drones y buzos. La recompensa inicialmente fijada en 20 millones de pesos se elevó sucesivamente a 50 millones y luego a 70 millones de pesos, para incentivar la colaboración ciudadana.
Durante las labores, se hallaron restos humanos en el entorno del río Frío. Tras análisis, se confirmó que pertenecían a un hombre adulto —Javier Mauricio García— quien había desaparecido por separado y no estaban relacionados con Valeria.
Recientemente, y tras 18 días de búsqueda, se confirmó el hallazgo del cuerpo sin vida de Valeria Afanador en inmediaciones del río Frío, cerca del colegio. Se activó el CTI de la Fiscalía para realizar las diligencias forenses pertinentes, en tanto se mantienen abiertas hipótesis sobre las causas de la muerte —accidente, rapto o desaparición forzada—, sin que hasta ahora haya una versión confirmada.
Las autoridades expresaron condolencias a la familia y ratificaron su compromiso de investigar con prontitud las circunstancias del caso.
