La comunidad del oriente caucano se encuentra consternada tras conocerse la muerte de Valentina Chilito, una joven que fue arrastrada por la corriente del río Páez el pasado martes, en el municipio de Belalcázar, en el departamento del Cauca.
Según testigos, la joven intentó atravesar el afluente en un momento de creciente, lo que derivó en una tragedia. A pesar de los gritos de advertencia de algunas personas en el lugar, la fuerza del agua fue implacable. Su cuerpo fue hallado por organismos de socorro más de 24 horas después, a varios kilómetros río abajo.
La Defensa Civil, en coordinación con líderes indígenas y la comunidad local, lideró las labores de búsqueda desde el momento de la desaparición. Los equipos resaltaron la dificultad del terreno y la fuerte corriente del río debido a las lluvias intensas que se registran en la zona.
«Es una pérdida dolorosa que nos recuerda los peligros de desafiar a la naturaleza», expresó un integrante del resguardo que participó en las labores de rescate.
Familiares de Valentina hicieron un llamado a la prevención: “No fue solo imprudencia, también fue falta de señalización y control. Necesitamos campañas reales de sensibilización”.
Las autoridades reiteraron el llamado a no cruzar ríos crecidos y mantener la alerta durante esta temporada de lluvias, especialmente en zonas rurales del Cauca, donde las crecientes súbitas pueden ser letales.
