Usuarios del servicio de acueducto de Las Ceibas Empresas Públicas (EPN) han manifestado su inconformidad tras recibir una notificación junto con la factura del mes de mayo, en la que se les exige reemplazar su medidor de agua en un plazo de 30 días. Según el comunicado, si el usuario no responde en ese tiempo, se entenderá que acepta el cambio. La empresa procederá a realizar la instalación del nuevo equipo y facturar su costo, o suspenderá el servicio si no se permite la intervención. La medida ha generado rechazo entre la ciudadanía, que considera que se está imponiendo de forma autoritaria y sin justificación técnica clara.
Desde la empresa se argumenta que la decisión responde a una revisión del sistema comercial, que evidenció que muchos de los medidores instalados no cumplen con la normativa vigente, especialmente con los requisitos de la cláusula 13 del Contrato de Condiciones Uniformes. Estos deben ser de clase superior a R160 y estar preparados para lectura remota, conforme a la norma NTC 1063 de 2007.
Más de 50 mil antiguos Las Ceibas asegura que el 40 % del parque de medidores en Neiva ya superó su vida útil. Actualmente, más de 14.000 dispositivos están averiados, mientras que otros 51.918 tienen más de una década de funcionamiento continuo. Por ello, desde el segundo semestre de 2024 se viene notificando a los usuarios cuyos medidores no han sido renovados desde 2016 o antes. La empresa permite que el cambio se realice con proveedores particulares, siempre que cumplan con las especificaciones técnicas, o con la misma entidad, que ofrece financiación del valor hasta en tres años a través de la factura mensual.