Uribe al rescate

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El expresidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, ha iniciado gestiones para intentar comunicarse con el Ministerio de Relaciones Exteriores, con el fin de colaborar en la resolución de la creciente tensión diplomática entre Colombia y Estados Unidos. Según fuentes cercanas al Centro Democrático, Uribe buscaría intervenir en el conflicto, especialmente tras las recientes declaraciones del presidente Gustavo Petro y la decisión del gobierno estadounidense de congelar las visas a los colombianos.

El exmandatario, conocido por su influencia tanto dentro como fuera del país, ha mostrado su preocupación por los efectos que este impasse puede tener en las relaciones bilaterales y en la situación de miles de ciudadanos colombianos. La medida de la administración de Donald Trump, que afecta directamente a los colombianos, fue una respuesta a los comentarios del presidente Petro sobre las políticas migratorias estadounidenses.

En su intento de mediar en la crisis, Uribe buscaría acercarse al actual ministro de Relaciones Exteriores, Álvaro Leyva, para ofrecer su apoyo y sus conocimientos en la gestión de crisis diplomáticas, como ocurrió durante su mandato, cuando Colombia logró mantener una relación cercana con Estados Unidos en diversas áreas. Fuentes del Centro Democrático han señalado que el expresidente considera que la situación «debe ser resuelta con urgencia, sin que los intereses de los colombianos sean sacrificados en el proceso».

«Lo más importante es que no se afecte la vida de nuestros ciudadanos. La relación con Estados Unidos debe ser cuidada, ya que es fundamental para el bienestar de Colombia», afirmó un portavoz del Centro Democrático, quien indicó que Uribe ve en esta mediación una forma de contribuir a la estabilidad del país y a la preservación de los intereses nacionales.

A pesar de las tensiones políticas que existen entre el actual gobierno y el expresidente Uribe, su papel como líder de una parte significativa del espectro político colombiano y su experiencia en asuntos internacionales podrían ser claves en este intento por suavizar la situación. De momento, no se ha confirmado si Uribe ha logrado establecer comunicación con Leyva, pero su disposición a ayudar a resolver el conflicto ha sido bien recibida por algunos sectores políticos y diplomáticos.

El gobierno colombiano, por su parte, ha hecho esfuerzos para calmar la situación con Estados Unidos, pero la incertidumbre persiste sobre el futuro de las relaciones entre ambos países. Con el apoyo de figuras clave como Uribe, se espera que se puedan encontrar soluciones que beneficien a los ciudadanos colombianos sin poner en riesgo la diplomacia internacional.


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