La Escuela de Patinaje Grandeza Sport, fundada por Néstor Dade Muñoz Parda en Neiva, enfrenta una difícil situación debido al deterioro del polideportivo del barrio Limonar, donde realizan sus entrenamientos. A pesar de los esfuerzos por mantener el espacio en condiciones óptimas, la inseguridad y la falta de mantenimiento han convertido la cancha en un riesgo para la comunidad.
Inseguridad y vandalismo
Desde hace seis años, la cancha ha estado en condiciones precarias. La falta de iluminación, producto del vandalismo, dejó el espacio en completa oscuridad durante varios meses, lo que propició la proliferación de actividades ilícitas, como el microtráfico y el consumo de sustancias psicoactivas. Incluso, algunos residentes denunciaron la presencia de personas realizando actos obscenos dentro del polideportivo en horas de la noche.
Aunque la policía ha brindado apoyo cuando es requerida, el problema persiste. “Después de las seis de la tarde, trabajar aquí se vuelve peligroso”, afirmó Muñoz Parda.
Peligro estructural
Además de la inseguridad, la infraestructura del polideportivo representa un peligro inminente. Partes de la estructura están deterioradas, y se ha evidenciado la extracción de materiales, posiblemente para su venta como chatarra. Muñoz Parda advirtió que la cancha podría colapsar, poniendo en riesgo a quienes la utilizan.
A pesar de los intentos de la escuela por delimitar la zona peligrosa con cintas de advertencia, estas fueron removidas por personas que continúan usando el espacio, exponiéndose a accidentes. “En cualquier momento puede ocurrir una fatalidad”, advirtió el entrenador.
Falta de respuesta
A pesar de las gestiones realizadas, la comunidad no ha recibido una respuesta concreta por parte de la administración municipal. Muñoz Parda mencionó que la Junta de Acción Comunal, liderada por Alexis, ha intentado gestionar soluciones, pero hasta el momento no se ha materializado ninguna acción.
“No nos ha llegado nadie a hacer acto de presencia”, afirmó Muñoz Parda, destacando la falta de apoyo institucional.
Un llamado urgente
Ante la falta de soluciones definitivas, la escuela y los habitantes del sector buscan un consenso sobre qué hacer con la cancha. Mientras algunos sugieren su demolición para evitar accidentes, otros consideran que esto privaría a la comunidad de un espacio recreativo.
“La policía nos ofrece acompañamiento si decidimos tumbarla, pero necesitamos la ayuda del municipio para recuperar o mejorar este bien”, expresó Muñoz Parda.
La comunidad del barrio Limonar y la Escuela de Patinaje Grandeza Sport hacen un llamado a la Alcaldía de Neiva y a las entidades competentes para que intervengan y brinden una solución efectiva que garantice la seguridad y el bienestar de los deportistas y residentes.
