La comunidad del municipio de Andalucía, ubicado en el corazón del Valle del Cauca, vive momentos de profunda tristeza e impacto tras la lamentable muerte de Jair Antonio Marín Toro, un joven trabajador que luchó durante varios días por su vida luego de sufrir un accidente eléctrico mientras desempeñaba labores de construcción.
Caso
Jair, conocido con cariño por todos como «Toño», tuvo este trágico incidente mientras que se encontraba realizando labores de construcción en un tercer piso de un inmueble. De forma accidental, hizo contacto con una cuerda de alta tensión que transportaba 13.000 voltios. La descarga eléctrica fue tan potente que lo lanzó desde el tercer piso, haciéndolo caer sobre un montículo de arena. Aunque ese detalle amortiguó en parte el golpe, la gravedad del accidente era inminente. Sus compañeros de trabajo, que presenciaron la escena, reaccionaron de inmediato. Alarmados por lo sucedido, dieron aviso a las unidades de bomberos, quienes acudieron rápidamente al lugar. Al llegar, Jair se encontraba en paro cardíaco y con graves quemaduras en gran parte de su cuerpo, producto de la descarga eléctrica. Gracias a la oportuna intervención del equipo de emergencia.
Atención
Fue trasladado inicialmente a una clínica en el municipio de Tuluá, donde recibió atención y lograron reanimarlo y estabilizarlo momentáneamente. Sin embargo, debido a la complejidad de sus lesiones y la necesidad de una atención especializada, fue remitido al Hospital Universitario del Valle, en Cali. Allí, Jair continuó en lucha por su vida, con el apoyo constante del personal médico y el acompañamiento de sus seres queridos. Lamentablemente, días después de su ingreso al hospital, sufrió una crisis multiorgánica, donde sus órganos vitales comenzaron a fallar de forma progresiva, lo que llevó finalmente a su fallecimiento, pese a los esfuerzos ininterrumpidos del cuerpo médico por salvarlo.
Dolor
La partida de “Toño” ha generado una ola de solidaridad en Andalucía. Familiares, amigos, vecinos y conocidos se han unido en oración y homenaje para recordar a un hombre trabajador, noble y profundamente comprometido con los suyos. En redes sociales y espacios comunitarios, se han difundido mensajes que resaltan su calidez humana, su dedicación y el profundo vacío que deja su ausencia. Para sus allegados, Jair no solo era un trabajador ejemplar, sino también un ser humano leal, cariñoso y siempre dispuesto a tender la mano a quien lo necesitara.
