En un alarmante incidente que refleja la creciente violencia en Neiva, un taxista fue brutalmente asaltado por varios delincuentes en horas de la tarde. La víctima, identificada preliminarmente como don Jairo, realizaba un servicio desde un conocido centro comercial del sur de la capital huilense hacia un sector entre los barrios Obrero Bajo y Ventilador, cuando sufrió este ataque inesperado.
El atraco
Según las versiones recopiladas por miembros de la comunidad, don Jairo fue abordado en inmediaciones a la calle 3 con carrera 19 por un grupo de hombres armados. En un ataque sorpresivo, lo hirieron en la cabeza con la cacha de un arma de fuego, mientras lo sometían. Los delincuentes no solo le robaron el dinero que había recaudado durante su jornada laboral, sino que también despojaron al taxista de las llaves de su vehículo, dejándolo en una situación vulnerable.
El hecho ha desatado la indignación de los conductores de servició público, quienes exigen a las autoridades locales mayores medidas de seguridad para proteger su integridad y la de sus pasajeros. En las últimas semanas, han aumentado los reportes de agresiones y robos a transportistas, lo que les ha generado un clima de temor e incertidumbre.
Solidaridad con un taxista
A pesar de la gravedad de la situación, varios colegas de la víctima y habitantes de la zona reaccionaron rápidamente ante el ataque. Los transeúntes y otros conductores lo auxiliaron, brindándole primeros auxilios antes de que llegaran las autoridades competentes.
Don Jairo fue trasladado de urgencia a un centro médico, donde recibió atención por las múltiples heridas, entre ellas una puñalada en su hombro derecho. Su estado de salud es estable, pero su recuperación se verá afectada por el trauma de esta experiencia.
Demandas
Este lamentable suceso ha reavivado las preocupaciones sobre la seguridad en la capital huilense. Miembros del gremio instan a las autoridades a implementar estrategias efectivas que garanticen la protección de quienes trabajan en el sector del transporte. Exigen mayor presencia policial en las calles, así como la instalación de cámaras de vigilancia en puntos críticos de la ciudad.
La ciudadanía está unida en la búsqueda de soluciones que ayuden a frenar esta ola de delitos que viene afectando gravemente la ciudad. Es imperativo que las autoridades escuchen estas demandas y actúen con urgencia para restablecer la confianza de los ciudadanos en su entorno. Neiva no puede seguir siendo un escenario de violencia e impunidad.
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Pie de foto: Don Jairo, perjudicado.
