Un respiro en medio del conflicto: Hamás libera a los últimos rehenes y se abre una ventana de diálogo

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Después de semanas de intensas negociaciones mediadas por Egipto y Catar, el grupo Hamás entregó a las autoridades israelíes a los últimos 20 rehenes que permanecían con vida desde el inicio de las hostilidades en Gaza. El operativo, supervisado por la Cruz Roja Internacional, se desarrolló bajo estrictas medidas de seguridad y marca un punto de inflexión en la crisis humanitaria que ha dejado miles de víctimas y un creciente llamado internacional al cese del fuego. Las familias de los liberados, que fueron trasladadas de inmediato a hospitales israelíes para recibir atención médica y psicológica, celebraron el reencuentro como un milagro en medio del horror.

El gobierno israelí confirmó que los rehenes liberados incluyen civiles de diferentes edades, entre ellos varios niños y ancianos, cuya condición de salud era motivo de preocupación. Aunque el primer ministro Benjamin Netanyahu destacó la operación como un logro de presión militar y diplomática, reiteró que su país no renunciará a la ofensiva contra Hamás hasta desmantelar por completo su estructura en Gaza. Paralelamente, las fuerzas israelíes mantienen intensos bombardeos sobre enclaves donde, según sus informes, aún operan mandos del grupo islamista.

Por su parte, Hamás aseguró que la liberación constituye un gesto “humanitario y político” destinado a demostrar su disposición al diálogo, siempre que Israel detenga los ataques y permita el ingreso de ayuda internacional a la Franja. Analistas consideran que este intercambio podría allanar el camino hacia nuevas conversaciones para un alto al fuego temporal, aunque advierten que la desconfianza mutua y las presiones internas en ambos bandos dificultan la posibilidad de una paz duradera. En medio de la incertidumbre, la comunidad internacional insiste en que la prioridad debe ser proteger a los civiles y abrir corredores humanitarios permanentes.


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