En la tarde del miércoles 22 de febrero, un patrullero de la Policía murió tras recibir un disparo en la cabeza por parte de un francotirador, al parecer miembro del Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Las autoridades identificaron a la víctima como Jaisson Jiménez Charrys, de 27 años. El hecho se produjo en zona rural del municipio de Sardinata, cuando el oficial se encontraba de servicio en la subestación de la Policía de la vereda Las Mercedes.
Aunque no hay una versión oficial de lo sucedido, se presume que el atacante disparó desde la altura de una montaña cuando el reloj marcaba las 5:45 p.m. Ahora, si bien las autoridades no han atribuido el asesinato a ningún grupo armado, se cree que el ELN está detrás del hecho, dado que esta guerrilla opera en esta zona a la entrada del Catatumbo.
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El comandante encargado de la Policía en la región, coronel Alejandro Reyes deploró esta acción calificándola como una acción demencial, informando a su vez que el Ejército Nacional ya ha desplegado todas las capacidades y estrategias pendientes para identificar y capturar a los responsables de la acción violenta. «Este es un acto demencial y expresamos nuestra solidaridad a la familia de nuestro patrullero».
El oficial reconoció el reinicio de las actividades violentas en el departamento por parte de los grupos ilegales que delinquen en esta zona del país, el ELN y las disidencias armadas, y es que en las últimas dos semanas dos uniformados de la Policía han sido asesinados bajo esta modalidad en la región del Catatumbo.
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