Domiciliario chocó y murió en Neiva

Joven venezolano muere en accidente de tránsito en Neiva; su familia clama por ayuda.
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En un trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad de la ciudad de Neiva, Jesús Enrique Hidalgo Rodríguez, un joven venezolano, perdió la vida tras sufrir una brutal colisión.

Los hechos

El incidente, que ha dejado a sus familiares y amigos sumidos en el dolor, ocurrió en horas de la noche en inmediaciones al barrio Encenillo, cuando el extranjero, quien trabajaba como domiciliario, sufrió una caída desde su motocicleta de placa KRN-20D, cuando al parecer, pretendía esquivar un hueco.

Hidalgo Rodríguez un joven venezolano había llegado a la capital huilense en busca de mejores oportunidades, como muchos de sus compatriotas que migran en busca de una vida más digna. De acuerdo a las versiones de testigos presenciales, el hoy fallecido se desplazaba por la carrera 32C con calle 23 del sur de la ciudad cuando ocurrió el fatídico accidente.

Pese a los esfuerzos por auxiliarlo y trasladarlo a un centro asistencial, las graves heridas que sufrió, especialmente a la altura de la cabeza, resultaron ser fatales. La noticia de su fallecimiento ha resonado en toda la comunidad, especialmente entre los migrantes venezolanos que también buscan una vida mejor lejos de su país natal.

Un Reconocimiento

Según amigos cercanos de Jesús Enrique, éste era conocido por su dedicación y esfuerzo, trabajando arduamente como repartidor de un establecimiento de comidas rápidas, para sostenerse en una ciudad lejana al seno de su hogar.

Su fallecimiento no solo representa una pérdida personal para sus allegados y amigos, sino que también subraya las difíciles condiciones que enfrentan muchos migrantes que, en su búsqueda de oportunidades, se ven expuestos a riesgos y peligros diarios. La precariedad laboral y la falta de protección social son solo algunos de los desafíos que enfrentan estos trabajadores.

Dificultades

Los familiares que lo acompañaba en Neiva se encuentran ahora en una situación desesperada, no solo por el dolor de su pérdida, sino también por la necesidad de reunir los fondos necesarios para repatriar su cuerpo a Venezuela y brindarle una cristiana sepultura junto a sus seres queridos. En medio del calvario que están viviendo, sus allegados han solicitado apoyo de amigos y conocidos, apelando a la solidaridad de la comunidad.

De igual manera, contactaron a medios locales con la esperanza de que la visibilidad del caso pueda atraer más ayuda. La situación es crítica, y los parientes del occiso requieren del apoyo de todos para poder cumplir con este último deseo de despedirlo en su tierra natal.

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Pie de foto: Jesús Enrique Hidalgo Rodríguez, murió.


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