Jean Carlos Sosa, de 26 años, fue asesinado en una entradera en Mendoza. Había sido secuestrado en Caracas y decidió instalarse en la Argentina, aunque estaba preocupado por los robos. Su esposa y madre de su pequeño hijo lo despidió con un profundo dolor en las redes sociales.
Jean Carlos Sosa era uno de los tantos venezolanos que se afincaron en la Argentina en busca de nuevas oportunidades. Se había instalado en la ciudad de Mendoza con su esposa y el pequeño hijo de ambos. Este miércoles por la noche, cuando regresaba a su casa, un grupo de delincuentes lo interceptó para robarle el auto. El joven, de 26 años, se trepó a la ventanilla para evitarlo: lo asesinaron de un disparo en el pecho.
El crimen ocurrió cerca de las 21.30 en la calle Chenaut al 3100, en la Cuarta Sección de la capital provincial. Según las primeras pericias, una vez que su pareja y su hijo entraron a la vivienda, Jean Carlos se quedó en el garaje acomodando una moto para hacer lugar. Minutos después, al buscar el auto, notó que dos hombres intentaban llevárselo.
El joven quiso impedirlo y en ese momento recibió el balazo mortal. El proyectil le entró por el costado izquierdo del pecho y los delincuentes escaparon con el vehículo. Su esposa llamó al Servicio de Emergencia Coordinado (SEC) y Sosa fue trasladado al Hospital Central de Mendoza. Los médicos no pudieron salvarle la vida y, a las 6.45 de este jueves, confirmaron su muerte.
