Ataco, el mágico municipio del sur del Tolima, donde se entrelaza la belleza natural para ofrecer una experiencia única.
Ubicado al sur del Tolima, en la zona sur-oriental del departamento, Ataco se encuentra rodeado por las majestuosas montañas de la cordillera Central y el imponente río Saldaña, lo que le confiere un paisaje natural único. Este municipio está conformado por su cabecera, el corregimiento de Santiago Pérez y 105 veredas que preservan la esencia de sus primeros pobladores: los indios Atacaimas y Cupilicuás, quienes junto a las tribus Coyaima y Natagaimas, bajo el liderazgo del cacique ATA y la cacica ICO, dieron origen a su nombre. Inicialmente conocido como Ataico, su denominación actual se debe a los colonos españoles.
La fundación de Ataco tiene dos versiones. La más aceptada por la comunidad atribuye su origen al ítalo-español Alonso Fuen Mayor, quien en 1778 estableció un caserío en la jurisdicción indígena, bautizándolo como Pueblo Viejo. Sin embargo, otra versión sostiene que fue Diego de Ospina y Maldonado quien fundó Ataco en 1657 como un «pueblo de indios» bajo la jurisdicción de la Villa de Purificación. A pesar de la controversia, la tradición local favorece la versión de Fuen Mayor, quien habría trasladado el poblado al actual San José de Ataco debido a los ataques de los indígenas Coyaimas y Natagaimas.
ATRACTIVOS TURÍSTICOS Y TRADICIONES
Ataco ofrece diversos sitios de interés para los visitantes. Entre ellos destaca la «Cascada Las Perlas», ideal para la recreación y la integración familiar; el «Parque de la Memoria ‘Cultura de Paz'», que rinde homenaje a las víctimas de la violencia; y la «Piscina Natural El Poira», un lugar perfecto para disfrutar de un refrescante baño en aguas cristalinas. Además, el municipio celebra las tradicionales Fiestas de San Pedro en honor al campesino y el Festival del Retorno, eventos que reúnen a la comunidad en torno a la música, la danza y la gastronomía típica del Tolima.
Ataco cuenta con 12 restaurantes que ofrecen platos típicos del Tolima como la lechona y el tamal, además de opciones variadas para todos los gustos. El municipio limita al norte con Coyaima y Chaparral, al oriente con Coyaima y Natagaima, al occidente con Rioblanco y Chaparral, y al sur con Planadas, lo que lo convierte en un punto estratégico para descubrir la riqueza cultural y natural del departamento.
