En la mañana del martes 17 de junio, la tranquilidad del barrio Getsemaní se vio interrumpida por una inquietante noticia. Jerry Lee Christopher, turista estadounidense de 40 años, fue encontrado muerto dentro de una habitación de un hospedaje ubicado en la calle Espíritu Santo, en pleno Centro Histórico de Cartagena. Turista estadounidense apareció muerto en un hotel de Cartagena.
Los empleados del hotel notaron que el huésped no respondía a los llamados. Tras ingresar a la habitación, encontraron su cuerpo sin vida, cubierto con sábanas. De inmediato, alertaron a las autoridades.
La escena no mostraba signos de violencia. Sin embargo, en el suelo y en la mesa de noche había restos de sustancias alucinógenas. Las autoridades consideran este hallazgo clave para avanzar en la investigación.
Autoridades investigan causas de la muerte; Turista estadounidense apareció muerto en un hotel de Cartagena
La Policía Metropolitana de Cartagena y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) realizaron la inspección al lugar y al cadáver. Medicina Legal asumió la responsabilidad de establecer la causa exacta del fallecimiento.
Aunque todo apunta a un posible consumo de sustancias psicoactivas, no se descartan otras hipótesis. Las autoridades también investigan si el turista estuvo acompañado antes de su muerte.
Vecinos y turistas que se encontraban en la zona presenciaron el levantamiento del cuerpo. El hecho generó preocupación en uno de los sectores más visitados por turistas nacionales e internacionales.
Te puede interesar: Desesperada búsqueda de niña arrastrada por la quebrada Chuniza en Usme
Tres extranjeros han muerto este año en Cartagena
Con la muerte de Jerry Lee Christopher, ya son tres los turistas extranjeros que han fallecido en circunstancias extrañas en Cartagena durante 2025.
En mayo, Anthony Maraglia, otro ciudadano estadounidense, fue hallado sin vida en un hostal del barrio Manga. Ese mismo mes, un turista chileno identificado como Nicolás Ignacio García también murió, esta vez en un hotel en Bocagrande.
Estos casos han encendido las alarmas en el sector turístico. Comerciantes y hoteleros piden mayor vigilancia y controles, especialmente ante el creciente consumo de drogas por parte de visitantes.
Las autoridades siguen con la investigación. El sector turístico exige más control. La ciudad busca respuestas ante estas repetidas tragedias.
