El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, reiteró este sábado su dura postura sobre la inmigración, afirmando que no es posible juzgar a todos los criminales que ingresan ilegalmente al país y que, en su lugar, deben ser expulsados de forma inmediata. A través de su red social, Truth Social, Trump cargó contra la política de fronteras abiertas del actual presidente Joe Biden, acusándolo de permitir la entrada de “asesinos, narcotraficantes, pandilleros e incluso enfermos mentales” sin consecuencias legales.
“No es posible juzgar a millones y millones de personas. Sabemos quiénes son los criminales y debemos sacarlos de Estados Unidos ¡Y RÁPIDO!”, escribió Trump, añadiendo que las decisiones de su sucesor están llevando al país hacia un “caos sin precedentes”.
Las declaraciones del exmandatario surgen en un momento en que enfrenta críticas judiciales por su propio manejo de la política migratoria. Este mes, el juez federal James Boasberg inició un proceso para declarar en desacato al Gobierno de Trump por desobedecer una orden judicial y deportar a más de 200 migrantes, en su mayoría venezolanos, a una megacárcel en El Salvador, en condiciones que grupos de derechos humanos han calificado de inhumanas. Sin embargo, un tribunal de apelaciones en Washington D. C. bloqueó temporalmente el intento del juez, dejando en suspenso el proceso.
En medio de esta controversia, Trump defendió sus acciones invocando la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, una normativa reservada tradicionalmente para tiempos de guerra, la cual utilizó el pasado 14 de marzo para expulsar a cientos de venezolanos que, según sus acusaciones, estarían vinculados a la organización criminal Tren de Aragua.
La postura de Trump refleja una radicalización de su discurso migratorio de cara a su campaña electoral, buscando reforzar su imagen de mano dura en un tema que sigue siendo clave para su base de apoyo.

