El sujeto, que se encuentraba recluido en la comisaría de Puerto Colombia, fue trasladado a un centro médico después de tres días sin comer.
Jersson Alejandro Rojas es el interno que decidió protestar contra el hacinamiento en la cárcel del Atlántico sellando sus labios con una aguja e hilo para someterse a una estricta huelga de hambre, para demostrar su descontento y rechazo a los altos niveles de aglomeración en la penitenciaría de Puerto Colombia, ubicada en el departamento del Atlántico.
El recluso, que tiene una medida de aseguramiento penitenciario en su contra, llevaba dos meses durmiendo, comiendo y permaneciendo en una celda de 3×3 metros que compartía con otras 28 personas, a pesar de que el espacio sólo está diseñado para albergar a un máximo de 10 hombres.
Después de tres días sin comer ni hidratarse, el interno presentó complicaciones de salud y tuvo que ser trasladado a un centro médico, donde los médicos no han podido prestarle los primeros auxilios al individuo porque su boca sigue pinzada.
El personero municipal Juan David Ortega, se pronunció ante el caso y dijo que el estado del interno es estable, al tiempo que hacen un llamado inaplazable al Inpec para que realice el traslado urgente de todos los internos a los centros donde un juez lo ordenó.
«Volvemos a hacer un llamado al Inpec para que traslade de manera urgente a estas personas para que puedan estar en condiciones de reclusión como lo indica la ley», dijo el defensor del pueblo.
Hasta el momento se desconoce cómo el interno tuvo acceso a la aguja y al hilo con el que se causó las heridas, situación que también está siendo investigada.
Fuentes extraoficiales afirmaron que a todos los internos que se encuentran recluidos en el centro penitenciario ya se les imputó un cargo específico, por lo que ya se les dictó medida de aseguramiento; sin embargo, a pesar de que un juez ordenó enviarlos a la cárcel La Picaleña de Ibagué, el Inpec no ha realizado su traslado.