Después de más de una década de trámites y reclamos, 420 personas de los municipios de Barbacoas, Magüí Payán y Roberto Payán finalmente recibieron su indemnización económica como parte del proceso de reparación individual a las víctimas del conflicto armado en la costa pacífica nariñense.
En total, el gobierno entregó más de 4.200 millones de pesos, destinados a personas que sufrieron desplazamiento forzado, homicidios de familiares, desapariciones, secuestros, torturas, violencia sexual y reclutamiento forzado de menores.
Voces de las víctimas
Karen Ortiz, víctima de desplazamiento forzado en 2010, relató cómo tuvo que abandonar su vereda La Playa con lo poco que pudo cargar. Hoy, tras recibir el dinero, espera abrir un pequeño negocio que le permita sostenerse.
“Aunque el dinero llegó tarde, siempre sirve. Ahora quiero emprender para poder vivir mejor”, expresó.
Deimy Angulo, otra habitante de Roberto Payán, recordó que ella y su familia fueron expulsados de su hogar en 2011. “Fueron muchos años esperando. Por fin llegó este día y agradezco que se hayan acordado de nosotros”, dijo con emoción.
Elena Quiñones, desplazada hace 22 años, planea invertir la indemnización en un negocio para garantizar un futuro más estable a sus hijos. En tanto, Marvel Landázuri anunció que destinará los recursos al mejoramiento de su vivienda en Magüí Payán.
Autoridades destacan avances en la reparación
El subsecretario de Paz y Derechos Humanos de Nariño, Álex González, aseguró que este paso representa un avance importante en la reparación integral, tanto individual como colectiva.
Por su parte, William Arteaga, director territorial de la Unidad de Víctimas en Nariño, destacó que este proceso busca resarcir los daños ocasionados por la violencia en el triángulo del Telembí, una de las zonas más golpeadas por el conflicto.
Con estas entregas, cientos de familias comienzan a reconstruir sus vidas, aunque para muchos el dinero nunca compensará las pérdidas sufridas.




