Un profundo dolor embarga al gremio educativo del Distrito Especial de San Andrés de Tumaco, luego de que una de sus docentes falleciera trágicamente por inmersión en medio de una jornada de integración que se realizaba con motivo del Día del Maestro. El hecho ocurrió en la tarde del jueves 15 de mayo en el sector conocido como El Salto, sobre el río que cruza la zona rural del municipio, en la vía Tumaco – Pasto lo cual ha generado gran conmoción.
La víctima fue identificada como Yakeline Minota Ortiz, de 44 años de edad, docente de Ciencias Naturales de la Institución Educativa Peña Colorada, ubicada en el corregimiento de Cajapí, kilómetro 33 de la vía mencionada. Según informaron las autoridades de la Seccional de Investigación Criminal, Sijín, al parecer Minota se encontraba compartiendo un día de campo con otros compañeros de la institución, una celebración que incluía actividades recreativas y un almuerzo típico con sancocho de gallina criolla.
Todo transcurría en un ambiente de alegría y compañerismo hasta pasadas las 4:00 p.m., cuando la profesora Minota decidió cruzar el río de una orilla a otra. Sin embargo, en medio del trayecto, al parecer una creciente repentina del caudal provocada por las intensas lluvias en la parte alta de la región la sorprendió y fue arrastrada por la fuerte corriente.
A pesar de los esfuerzos de sus compañeros por auxiliarla, las condiciones del río impidieron una intervención inmediata. Tras varios minutos de búsqueda desesperada, lograron encontrar su cuerpo algunos metros aguas abajo. De inmediato, fue trasladada al Hospital San Andrés de Tumaco, donde el personal médico confirmó que ya no presentaba signos vitales y por consiguiente no fue posible hacer nada al respecto.
Funcionarios de la Sijín hicieron presencia en el centro asistencial para realizar la inspección técnica del cadáver y proceder con el levantamiento del cuerpo, que posteriormente fue entregado a sus familiares.
Yakeline Minota Ortiz era una docente con más de 11 años de servicio en la Secretaría de Educación de Tumaco. Estaba casada, tenía tres hijos menores de edad y residía con su familia en el barrio La Florida, Comuna 2 de la ciudad. Su muerte ha causado consternación entre sus colegas, estudiantes y comunidad educativa, quienes la recuerdan como una maestra comprometida, alegre y dedicada a su labor.



