La emergencia se originó luego de un fuerte aguacero que desbordó el afluente conocido como Quebrada Seca, provocando un deslizamiento de tierra que terminó impactando directamente sobre una vivienda construida en cercanías al cauce.
Según información suministrada por habitantes del sector y confirmada por fuentes locales, la creciente súbita sorprendió a los residentes durante la noche, generando pánico entre las familias que habitan en la zona. Afortunadamente, no se reportaron víctimas fatales ni personas heridas, aunque las pérdidas materiales fueron totales para los afectados.
Organismos de socorro y el Cuerpo de Bomberos de Pitalito acudieron al lugar de los hechos para atender la situación y verificar las condiciones del terreno. Las autoridades municipales evalúan ahora el riesgo en las viviendas vecinas y han hecho un llamado a la comunidad para que reporten cualquier señal de deslizamiento o inestabilidad.
Según el capitán Gilberto Rojas Sánchez, líder bomberil de Pitalito, aseguró que se activaron los protocolos de emergencia y se brindará atención inmediata a la familia damnificada. Así mismo, se solicitó al Consejo Municipal de Gestión del Riesgo realizar un monitoreo permanente en Guacacallo y otros sectores vulnerables ante la ola invernal que azota al sur del departamento.
