La madrugada del 8 de agosto se registró un grave accidente minero en Boyacá que dejó dos víctimas mortales. Los trabajadores del carbón, Jorge Iván Díaz Rodríguez y Jhon Stid Granados Rodríguez, fallecieron dentro de un socavón ubicado en la vereda San Nicolás, sector Santa Rita, jurisdicción del municipio de Tuta.
Según las primeras informaciones, ambos ingresaron a la mina en horas de la madrugada y no regresaron. Familiares y compañeros alertaron a las autoridades, iniciándose una intensa búsqueda que concluyó con el hallazgo de los cuerpos sin vida. Las hipótesis preliminares señalan que la causa fue la inhalación de gases tóxicos, posiblemente monóxido de carbono.
Las labores de rescate estuvieron a cargo de mineros de la zona, con apoyo del Cuerpo de Bomberos de Tuta y la Policía Metropolitana de Tunja. El hecho causó consternación en Paipa, de donde eran oriundos los fallecidos, y ocurrió justo cuando la región buscaba retomar la normalidad tras varios días de paro minero.
Líderes del sector recordaron que la minería subterránea implica riesgos constantes, como la acumulación de gases peligrosos y la falta de ventilación, factores que pueden ser mortales si no se cumplen los protocolos de seguridad.
La Fiscalía y las autoridades competentes iniciaron investigaciones para determinar las circunstancias exactas del accidente y verificar si el socavón cumplía con las normas técnicas exigidas.
En Paipa, la comunidad organiza homenajes póstumos para despedir a las víctimas, mientras familiares reciben mensajes de apoyo y solidaridad.
Este caso se suma a la lista de tragedias mineras en Boyacá, una de las regiones con mayor producción de carbón en Colombia, lo que reitera la urgencia de fortalecer las medidas de prevención y garantizar condiciones laborales seguras para los trabajadores.




