
Nataly Vásquez, habla sobre lo importante que es la inteligencia emocional en los jóvenes.
En Ibagué, una propuesta liderada por Nataly Vásquez y su esposo busca transformar vidas a través de la formación actoral y comunicativa. Este proyecto, que reúne a niños y jóvenes, tiene como objetivo dotarlos de herramientas que les sirvan tanto en el mundo artístico como en su vida personal. Los participantes no sólo desarrollan habilidades de actuación, sino que también mejoran su expresión, socialización y comunicación dentro de sus entornos.
Un aspecto destacado de esta formación es el trabajo en inteligencia emocional, considerado por Vásquez como esencial para el crecimiento integral de cada estudiante, pues las dinámicas y talleres les enseñan a identificar y gestionar sus emociones, lo que resulta en una mayor autoestima y autoconfianza. «La imagen personal no es solo apariencia, es cómo nos sentimos por dentro y cómo proyectamos esa seguridad en todo lo que hacemos», señaló Vásquez.
Además, esta iniciativa fomenta valores como la resiliencia y la empatía, preparando a los estudiantes no solo para los escenarios, sino para enfrentar con éxito los retos de la vida cotidiana. Vásquez resalta que el impacto va más allá del ámbito artístico, ya que estas habilidades contribuyen al desarrollo de relaciones interpersonales más saludables y efectivas, «lo que aprenden aquí lo llevan a su familia, sus amigos y su comunidad», comentó.
El proyecto también ha servido como plataforma para visibilizar el talento emergente en la ciudad, brindando oportunidades a quienes desean incursionar en el mundo del arte. Vásquez, representante de artistas emergentes, subraya que la actuación no solo es un medio de expresión, sino una herramienta para fortalecer el autodescubrimiento y la creatividad. Este enfoque integral permite que los jóvenes no solo perfeccionen su talento, sino que crezcan como personas seguras, preparadas y comprometidas con su entorno.
Este compromiso con el desarrollo personal y emocional de los participantes es lo que diferencia esta propuesta en Ibagué, donde el arte se convierte en un vehículo para construir confianza y transformar vidas. Vásquez concluyó reafirmando que su meta es continuar promoviendo espacios donde los jóvenes puedan no solo soñar, sino también encontrar las herramientas necesarias para alcanzar esos sueños.





