Óscar Gutiérrez celebró que 88 familias de Rioblanco tendrán electricidad por primera vez.
Luego de más de medio siglo de oscuridad, las veredas Los Naranjos y San Mateo, en el municipio de Rioblanco, finalmente contarán con servicio de energía eléctrica. Esta transformación, liderada por la Gobernación del Tolima y la Empresa Generadora de Energía del Tolima (EGETSA), beneficiará directamente a 88 familias campesinas que durante décadas vivieron sin acceso a este servicio básico.
La noticia fue confirmada por el gerente de EGETSA, Óscar Gutiérrez, quien destacó que esta electrificación rural es parte de un compromiso con la equidad. “Durante años estas comunidades estuvieron olvidadas, pero hoy, gracias al liderazgo de la Gobernadora Adriana Magali Matiz, estamos haciendo justicia social con inversiones que transforman vidas”, expresó el funcionario.
El proyecto arrancó en enero de 2025 y se tiene previsto que sea entregado oficialmente en el mes de agosto. Durante este periodo, los técnicos trabajaron en zonas de difícil acceso para instalar postes, cableado y transformadores que permitan llevar electricidad constante y segura a las viviendas beneficiadas.
La inversión para este proyecto supera los $2.000 millones, recursos que fueron destinados no solo para la conexión eléctrica, sino también para garantizar la sostenibilidad del servicio. Esta iniciativa abre la puerta a nuevas oportunidades productivas y educativas para niños, jóvenes y adultos de la zona rural de Rioblanco.
Los habitantes manifestaron su alegría y gratitud por este avance. “Ahora nuestros hijos podrán estudiar en la noche, podremos refrigerar alimentos y emprender pequeños negocios. Es una nueva vida para todos”, dijo don Manuel, residente de Los Naranjos.
La electrificación también impacta en la seguridad de la zona, que al estar iluminada, reduce el riesgo de accidentes y actos delictivos. La Gobernación del Tolima reiteró su compromiso de seguir cerrando brechas en el acceso a servicios públicos.
Desde la institucionalidad, se ha hecho énfasis en que este tipo de proyectos fortalecen el arraigo campesino, evitando la migración forzada hacia zonas urbanas. La electricidad, más que un servicio, se convierte en una herramienta de desarrollo social y económico.




