Oscar Javier Molina es un gestor de paz que ha venido trabajando por el Meta y otros departamentos del país en cuestiones de reconciliación y justicia.
Frente al nuevo comienzo que tendrá el país después de las elecciones presidenciales, quienes han decidido dejar las armas atrás se encuentran en un estado de zozobra ya que deberán enfrentarse a un nuevo plan de gobierno, de esto y otros temas relacionados con la paz, Oscar Molina estuvo conversando con EXTRA.
Labor
La labor de Oscar inició hace doce años cuando, por voluntad propia decidió dejar las armas y entrar en un proceso de paz, creyendo en un futuro diferente en donde eligió el cambio y decidió tomar en sus manos herramientas para empezar de nuevo. Desmovilizándose en casibare, Meta, dejando atrás sus días como paramilitar para convertirse en un gestor de paz.
De esta manera emprendió un camino que no le ha sido fácil recorrer, logrando ayudar a muchos que como él decidieron dejar atrás el camino de la guerra, tomando un nuevo curso para contribuir a la reconciliación.
Dentro de sus tareas como gestor, se encuentra recorrer cuanta universidad y espacio de socialización le brinden para hablar de paz, enseñarles a los estudiantes de derecho en lo que consiste la justicia, la verdad y la reparación.
Además de esto, su trabajo también se ha desarrollado en el departamento del Huila, donde trabajó con desmovilizados, y jóvenes que estaban inmersos con la delincuencia común de las comunas de Neiva, dentro de los casos que ha llevado se destaca el de Ignacio Becerra un hombre que según relató Molina, casi se convierte en un falso positivo de la justicia colombiana, pues iba a ser condenado a 45 años de prisión; pero como explicó Oscar, gracias al trabajo de él como gestor, y otras mediaciones, don Ignacio logró salir libre y pronto terminará su proceso.
No ha sido fácil
Según, le contó a EXTRA, su labor no ha sido compleja y no solo esto, sino que también ha sido difícil lograr que quienes han decidido dejar las armas sean perdonados por la sociedad e igualmente puedan encontrar oportunidades laborales.
Su trabajo ha sido permeado varias veces por ataque en su contra, Oscar aseguró que por un tiempo estuvo acompañado por protección que le brindó el estado, sin embargo esta gestión no fue suficiente, pero afirmó que pese a las amenazas continúa firme en su trabajo por la paz.
En cuanto al proceso de desmovilizaciones su proceso de resocialización, manifestó que ha sido una labor de difícil aceptación en donde en varios sectores de la ciudad de Villavicencio, Granada y otros municipios les han cerrado las puertas para lograr un nuevo comienzo a los jóvenes que han dejado los frentes armados.
Aclaraciones
En medio de la charla con EXTRA, Oscar Molina, aclaró que, hay noticias falsas que corren por medio de redes sociales donde acusan a los desmovilizados de amedrentar a las personas para que den su voto por un candidato en específico, pero él afirmó que este tipo de información no es correcta ya que según sus propias palabras “La paz no tiene ni izquierda ni derecha” y que las personas que han dejado las armas no demuestran ningún interés político, sino que solo desean trabajar por la justicia, la paz y la no repetición.
Debido a esto uno de sus nuevas labores consiste en trabajar de la mano con la MOE, para demostrar que en el Meta los desmovilizados no estarían realizando hostigamientos a favor de ningún candidato.
De manera exclusiva le reveló a EXTRA que en la actualidad, la justicia penal, fallo a su favor, evidenciando que él sería inocente de un proceso en donde presuntamente estaba siendo inculpado cuando él ya había abandonado las filas del frente armado.




