El director de Convivencia y Seguridad, Alexi Javier Trujillo Ramírez, anunció la entrada en vigencia del toque de queda sancionatorio en Neiva, una medida que marca un antes y un después en la forma de enfrentar la inseguridad en las comunas más vulnerables. La restricción se aplicará todos los días entre las 9:00 de la noche y las 5:00 de la mañana, con el objetivo de proteger a los menores de edad y disminuir su exposición a riesgos en la calle.
Durante los últimos 30 días, las autoridades adelantaron una fase de sensibilización para que padres y acudientes conocieran la norma. Sin embargo, desde ahora las consecuencias serán reales: quienes permitan que sus hijos permanezcan en el espacio público en los horarios restringidos deberán asumir sanciones pedagógicas, comunitarias o pecuniarias de hasta $729.900 pesos.
Primeros responsables
Trujillo Ramírez subrayó que este control busca generar corresponsabilidad en las familias, pues los menores no solo están expuestos a delitos sino también al consumo de sustancias psicoactivas. En los casos más graves intervendrán rutas de salud y la Policía Nacional.
La articulación con el ICBF, la Policía Metropolitana y la Secretaría de Convivencia fortalece el alcance de la estrategia, que pretende disminuir los índices de riñas y delitos asociados a la presencia de menores en horas nocturnas.
“El mensaje es claro: la seguridad de nuestros hijos empieza en casa. Si los padres no cumplen, deberán responder ante la ley y también con su bolsillo”, concluyó el funcionario.
La Administración Municipal espera que esta medida, más que sancionar, logre cambiar conductas y recuperar la tranquilidad en los barrios de Neiva.
