Una grave denuncia sacude nuevamente los muros del Coiba de Picaleña, en Ibagué. Un grupo de reclusos reveló la existencia de una presunta red criminal que estaría operando al interior del penal con el aparente respaldo de funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC). Los testimonios fueron entregados en un audio difundido desde el centro carcelario, donde se narran supuestos actos de corrupción, violencia y extorsión.
Según los denunciantes, quienes prefirieron ocultar su identidad por temor a represalias, en el patio 11, bloque 1, mandan internos conocidos con alias como ‘Copete’, ‘La Gata’, ‘Fox’, ‘Cejas’, ‘Sombra’ y ‘La Chinga’. Estas personas serían las que ejercen un violento control, ordenando golpizas, amenazas y hasta ataques con armas cortopunzantes contra otros privados de la libertad. En la versión de los internos, estas dinámicas solo serían posibles gracias a presuntos acuerdos económicos entre los cabecillas y algunos funcionarios del penal.
En el testimonio se mencionan directamente al teniente Valderrama y a un distinguido de apellido Ramírez, quienes habrían recibido dinero para permitir el ingreso de estupefacientes y armas. Además, se señala que habrían brindado protección a las estructuras que dominan actividades ilícitas en la cárcel.
De acuerdo con la denuncia, los recientes hechos de violencia dentro del establecimiento, en los que varios internos resultaron heridos con quemaduras y lesiones graves, al parecer, estarían relacionados con esta red. Hasta el momento no hay un pronunciamiento oficial, y se espera que las autoridades competentes verifiquen estas graves acusaciones.




