Una desgarradora escena de violencia familiar estremeció a los habitantes de Jamundí, Valle del Cauca. En el conjunto residencial Torres de Alamadina, un hombre fue acusado de lanzar a su hija, de solo 5 años, desde el tercer piso del edificio.

El incidente, según las primeras investigaciones, ocurrió en el marco de una acalorada discusión entre el hombre y la madre de la menor. Testigos relatan que la situación se tornó caótica, lo que derivó en el trágico desenlace.
Horas después, durante la madrugada del martes, se confirmó que tanto la niña como su progenitor habían fallecido debido a las graves lesiones sufridas. La pequeña fue trasladada a una clínica en Cali, donde ingresó con heridas severas, incluyendo lesiones en un ojo y fracturas en las costillas.
El acto despertó la furia de la comunidad, que intentó linchar al hombre tras el ataque. La Policía llegó rápidamente al lugar y logró rescatar al señalado, pero los residentes arremetieron contra los uniformados, dañando dos patrullas y dos motocicletas oficiales en el proceso.
La Alcaldía de Jamundí emitió un comunicado lamentando profundamente lo sucedido:
«La Policía atendió una situación delicada en el Conjunto Residencial Torres de Alamadina, donde un hombre fue detenido tras un grave incidente que involucró a una menor de edad. La niña fue trasladada en estado reservado a una clínica en Cali. Las autoridades competentes ya están investigando los hechos para esclarecer lo sucedido».
Hasta el momento, no se ha proporcionado información sobre el estado o participación de la madre en este caso, ni sobre las circunstancias exactas que llevaron al desenlace fatal.
El hecho ha generado conmoción y rechazo en el municipio. Las organizaciones defensoras de los derechos de los niños han exigido celeridad en las investigaciones y que se refuercen las políticas de protección a menores para evitar tragedias como esta.
Las autoridades han llamado a la calma y reiteraron la importancia de permitir que los organismos judiciales lleven a cabo las investigaciones necesarias para esclarecer lo ocurrido.
Este suceso pone de relieve la necesidad de atención psicológica y programas de intervención en familias que enfrentan conflictos graves, para prevenir más actos de violencia que afecten a los más vulnerables.




