En la madrugada de este miércoles, un grupo de hombres en motos atentó con explosivos contra varias cámaras de fotomultas ubicadas en el sur de Cali, generando conmoción entre los habitantes de la zona. Según reportes locales, las detonaciones se escucharon cerca de la carrera 100 con calle 25, y causaron la caída y destrucción de estas cámaras, que monitorean y sancionan infracciones de tránsito.
Aunque aún no hay detenidos ni un pronunciamiento oficial detallado sobre los autores o sus motivos, las autoridades investigan si se trata de un acto de protesta contra las medidas de control vial o un acto de delincuencia. La Alcaldía de Cali ha condenado el atentado, calificándolo como una acción vandálica que afecta la seguridad y el orden público, y ha anunciado reforzamiento en la vigilancia y la instalación de equipos de seguridad para evitar futuros ataques.
El atentado se suma a una serie de recientes hechos violentos recientes en Cali y la región, donde la destrucción o vandalización de cámaras de fotomultas ha sido utilizada como mecanismo para impedir la imposición de sanciones a conductores infractores. En ocasiones anteriores, grupos de delincuentes o manifestantes han tumbado estas cámaras en varios puntos de la ciudad, principalmente en sectores con alta circulación de motos y donde la inseguridad vial es una constante preocupación para las comunidades.
En medio de la ola de ataques vandálicos, la Secretaría de Seguridad y Justicia de Cali ha manifestado su compromiso para fortalecer las estrategias de protección de la infraestructura vial y garantizar que los responsables sean capturados y judicializados.
