Sismo en la madrugada: registro de magnitud 2,8 cerca de Bahía Solano, Chocó

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En la madrugada del jueves 6 de noviembre de 2025, a la 01:28 hora local, el Servicio Geológico Colombiano (SGC) reportó un sismo de magnitud 2,8 con epicentro en el océano Pacífico cercano a la costa de Bahía Solano, en el departamento del Chocó. El evento fue catalogado como superficial (profundidad menor a 30 km) y, según los primeros comunicados oficiales, no hay reportes iniciales de daños o víctimas.

¿Qué indican las autoridades?

El SGC publicó el registro técnico del evento en sus canales oficiales indicando magnitud, coordenadas aproximadas y que se trata de un sismo de baja magnitud y poca profundidad; por eso fue registrado por las estaciones sísmicas pero con baja probabilidad de generar daños estructurales significativos. Las autoridades sísmicas invitan a la ciudadanía a reportar cualquier percepción del temblor en la plataforma sismosentido.sgc.gov.co para mejorar el monitoreo.

¿Se sintió en tierra firme?

Por su magnitud (2,8) y ubicación oceánica cercana a Bahía Solano, lo más probable es que el movimiento haya sido percibido de forma leve —o no percibido en absoluto— por habitantes cercanos a la costa y meses interiores; en eventos superficiales pequeños, la percepción depende mucho de la distancia al epicentro y del tipo de suelo en cada localidad. Hasta el cierre de los primeros reportes los organismos locales no habían informado daños materiales ni interrupciones en servicios.

Contexto sísmico de la región

La costa pacífica colombiana es una zona con actividad sísmica frecuente, influenciada por la interacción de la placa de Nazca con la placa Sudamericana, además de fallas locales. En el Pacífico se registran con frecuencia sismos de pequeña y mediana magnitud; la mayoría son superficiales y no causan daños mayores, aunque sí representan riesgos en caso de eventos mayores o tsunamis —por eso el monitoreo permanente del SGC es clave. En días recientes se han reportado varios movimientos telúricos de distinta magnitud en diferentes sectores del país, reflejando la vigilancia constante de la red sísmica nacional.

Qué significa que el sismo sea “superficial”

Los sismos superficiales (profundidad menor a 30 km) ocurren en la corteza terrestre cercana a la superficie; cuando su magnitud es alta pueden producir movimientos más intensos en zonas cercanas. En este caso la magnitud (2,8) es baja, por lo que, aun siendo superficial, el potencial de daño es muy bajo. No obstante, los sismos superficiales son importantes para la sismología porque ayudan a identificar fallas activas y a mapear la sismicidad regional.

Recomendaciones para la población

Aunque este temblor no representa una amenaza directa, las autoridades recomiendan mantener medidas básicas de autoprotección ante cualquier movimiento sísmico:

  • Mantener la calma y no entrar en pánico.
  • Alejarse de ventanas, muebles altos o elementos que puedan caer.
  • Identificar rutas de evacuación si se está en zonas costeras (en caso de sismos mayores podría activarse una alerta de tsunami).
  • Verificar información oficial en cuentas institucionales del SGC, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y alcaldías o gobernaciones.

Impacto en Bahía Solano y la región

Bahía Solano es un municipio costero del Chocó conocido por su riqueza natural —playas, selva y avistamiento de ballenas— y por ser un punto habitado pero con infraestructuras dispersas. En general, la infraestructura en zonas rurales y costeras suele ser más vulnerable, por lo que las autoridades locales suelen mantener protocolos de revisión tras cada sismo sensible. En este caso específico no se han reportado emergencias asociadas.

Qué buscan los especialistas tras el evento

Los sismólogos usan registros como este para:

  1. Confirmar la ubicación y características del evento (magnitud, profundidad, tiempo).
  2. Correlacionarlo con la actividad regional para identificar patrones o posibles enjambres sísmicos.
  3. Mantener actualizados los mapas de riesgo y la red de estaciones.
    Estos datos ayudan a mejorar modelos de riesgo y a prevenir en el futuro.

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