Italia siempre ha sido un país que ha tenido que luchar contra el racismo y el antisemitismo, por eso, los directivos del fútbol italiano tomó varias decisiones para luchar contra la sombra que algunos desadaptados han querid perpeturar en el balompié italiano.
Uno de las principales decisiones tomadas por las directrices del ‘calcio’ fue prohibir a los jugadores de todos los equipos pertenecientes a la Federación Italiana de Fútbol, usar el dorsal 88, símbolo histórico que repesenta el saludo ‘Heil Hitler’ saludo al que fue uno de los genocidas más grandes de la historia.
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El número 88 representa la octava letra del abecedario, la H, por lo que el 88, sería HH, las iniciale del saludo característico del Tercer Reich.
En la actual liga italiana solo dos jugadores poseen el número: Mario Pasalic, volante del Atalanta y el croata Toma Basic, jugador actual de uno de los equipos con mayor tradición antisemita del fútbol italiano: la Lazio
Otra de las destacadas decisiones tomadas por los directivos, fue la de detener cualquier partido en donde se escuche cualquier tipo de cántico antisemita en cualquier escenario de fútbol en Italia.
Gabriele Gravina, presidente de la Federación Italiana de Fútbol, se expresó luego de la decisión diciendo que: “En esos asuntos, no reculamos ni un ápice ya que la credibilidad del fútbol, herido por comportamientos discriminatorios, tiene un impacto directo en la sociedad italiana”
Uno de los últimos eventos en donde se presentaron actos de antisemitismo fue en abril, cuando Ruth Dureghello, presidenta de la comunidad judía de Roma, denunció que en el ‘clásico de la capital’ vio a un hincha de la Lazio usar una camiseta con el nombre ‘hitlerson’ y el número 88, haciendo apología al nazismo, La Lazio decidió identificar al hincha y expulsarlo de por vida del estadio Olímpico de Roma.
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