Un reciente fallo judicial ordenó a Corpoamazonía suspender la declaratoria de una reserva ambiental en el municipio de Mocoa, Putumayo. La decisión fue tomada tras una acción legal interpuesta por comunidades de la zona, quienes argumentaron que la entidad no cumplió con los procedimientos de participación ciudadana y consulta previa.
La medida judicial se convierte en un nuevo capítulo del debate sobre la gestión ambiental en el sur del país, donde confluyen los intereses de conservación ecológica con las necesidades de desarrollo económico y social de las comunidades locales.
Según el tribunal, la declaratoria de la reserva no tuvo en cuenta los aportes de los habitantes que se verían directamente afectados, lo cual representa una vulneración a los principios de participación ciudadana garantizados por la Constitución. Además, se señaló que no hubo claridad en los estudios técnicos que respaldaban la delimitación de la zona protegida.
Argumentos comunitarios
Los líderes de las comunidades rurales de Mocoa celebraron la decisión judicial, afirmando que con la suspensión se abre un espacio para que se escuchen sus voces. Alegan que, aunque reconocen la importancia de proteger la Amazonía, no se puede hacer a costa de sus derechos y de los proyectos productivos que han sostenido durante años.
“Nosotros queremos conservar, pero también necesitamos que se reconozca nuestra forma de vida. No se puede imponer una medida sin diálogo”, manifestó uno de los voceros campesinos.
Por su parte, organizaciones ambientales expresaron preocupación por el fallo, advirtiendo que la suspensión puede poner en riesgo ecosistemas estratégicos que requieren protección inmediata frente a la deforestación y la expansión de actividades ilegales.
Reacciones oficiales
Desde Corpoamazonía se informó que respetarán la decisión del juez, aunque insistieron en que la declaratoria de la reserva respondía a criterios técnicos de conservación y protección de la biodiversidad. La entidad anunció que revisará las observaciones de la comunidad y ajustará los procedimientos para evitar futuras controversias.
El caso ha puesto nuevamente en el centro del debate la tensión entre la protección ambiental y los derechos de las comunidades. Para algunos expertos, la clave está en lograr un equilibrio que permita preservar los ecosistemas sin desconocer la participación ciudadana.
Mientras tanto, el futuro de la reserva ambiental en Mocoa queda en suspenso, a la espera de que se surta un proceso más incluyente que permita construir consensos entre autoridades, comunidad y organizaciones defensoras del medioambiente.




