La paz, es uno de los sueños que tienen los colombianos desde hace décadas, más aún cuando muchos han hecho parte de esas guerras internas, guerras que solo han dejado desgracias en las familias, especialmente en las campesinas.
Es lamentable este tipo de acciones, siendo Colombia uno de los países con mayor diversidad de clima, fauna, riquezas, etc. Somos los más ricos del mundo así muchos no lo vean, ya que no han tenido la oportunidad de sobresalir debido a la falta de compromiso político, y cuando digo que Colombia es el país más rico del mundo, es porqué hay argumentos, primero sus tierras, el oro, los metales preciosos que son explotados por desconocidos, diamantes, esmeraldas, entre otros.
Así mismo este país cuenta con riquezas hídricas, energía, pesca, cría de diferentes especies de animales, diversos lugares turísticos que son visitados por los extranjeros y se van con una perspectiva diferente del país. Es una impresión diferente y son ellos quienes van a sus tierras a mostrar estás riquezas.
Colombia es rica en educación, cultura, deportes, grandes médicos en diferentes áreas, ciudadanos soñadores, campesinos que son muy amables, lo que hace que este país sea el mejor del mundo.
Pero lamentablemente, todo se opaca con los hurtos, las drogas, las guerrillas, el para militarismo, los homicidios, las extorsiones, el secuestro, la rebeldía que tienen los grupos al margen de la ley, que solo juegan con la ilusión del pueblo, al decir que ya llegaron a acuerdos con el gobierno nacional para las mesas de diálogo, y que cuando se les da la gana, se paran y desbaratan todo lo que se había logrado para tener la paz.
Y hoy vemos como este país rico, en todo, es explotado sin control, y todo porque los encargados los líderes de enfrentar nuevos retos de mejora se vuelven títeres de un sistema político y delincuencial que conlleva a ver morir al pueblo.
