En horas del mediodía, se registró un ataque con explosivos contra la subestación de Policía de El Patía, en el sur del departamento del Cauca. La explosión dejó a un policía herido, y lamentablemente, una perrita adoptada por los agentes perdió la vida en el incidente. La comunidad está consternada ante este nuevo acto de violencia en la región.

Según informes preliminares, sujetos a bordo de un vehículo lanzaron dos granadas contra la subestación mientras pasaban frente a la estructura. Las esquirlas causadas por la explosión dejaron a un uniformado lesionado, quien fue trasladado a un centro asistencial cercano para recibir atención médica. Además, la explosión afectó gravemente la infraestructura de la subestación y causó daños en viviendas aledañas, aumentando la preocupación en la comunidad por su seguridad.
La perrita, que había sido acogida por los policías y se había convertido en parte de su familia, no sobrevivió al ataque, lo que ha generado una profunda tristeza entre los agentes de la estación.

El atentado ocurre en medio de la operación militar Perseo, lanzada el pasado 12 de octubre de 2024 en el corregimiento de El Plateado, municipio de Argelia, como parte de una estrategia de las Fuerzas Militares para recuperar el control de esta zona, que ha sido escenario de actividades de grupos armados ilegales, en particular del frente Carlos Patiño. Según un uniformado entrevistado por El País, el ataque sería una represalia contra la presencia militar en la región y el avance de esta operación, que ha generado ya tres ataques en las últimas dos semanas, intensificando el conflicto en la zona.
Ante el ataque, las Fuerzas Militares enviaron refuerzos a la subestación de El Patía para fortalecer las tareas de vigilancia y seguridad. Además, la Gobernación del Cauca activó un Puesto de Mando Unificado (PMU) para coordinar la respuesta al atentado y anunció un consejo extraordinario de seguridad. El secretario de Gobierno del Cauca, Juan Diego Gómez, confirmó que se tomarán medidas adicionales junto a las autoridades locales y militares para reforzar la seguridad y definir estrategias de control en la zona.
Las autoridades han desplegado un operativo en la región para localizar a los responsables del ataque, mientras la comunidad permanece en alerta y a la espera de que la situación de orden público mejore.




