Los antecedentes
El pasado 30 de julio, alrededor de la media noche Kevin Mateo Rodríguez se encontraba departiendo algunas bebidas alcohólicas con unos amigos en un reconocido establecimiento comercial del centro de Cartagena del Chaira.
Minutos después fueron sorprendidos por tres sujetos que se desplazaban en dos motocicletas y que, sin mediar palabra, desenfundaron un arma de fuego y dispararon contra la humanidad de estas personas, dejando como resultado dos sujetos muertos en el lugar de los hechos y uno más herido quien hasta el día de hoy batalló por sobrevivir, pero lamentablemente, debido a la gravedad de las lesiones, murió.
Luchó por vivir
Mas de dos meses estuvo Kevin Mateo en una unidad de cuidados intensivos del Hospital María Inmaculada en la ciudad de Florencia. Versiones extraoficiales afirman que en algunas ocasiones presentó una leve mejoría y que gracias a esto le habían retirado el oxígeno que necesitaba para poder respirar debido a que la comprensión del pecho por una de las heridas de bala, se lo impedía. Sus familiares, allegados y amigos deseaban con ansias su pronta recuperación, pero a pesar de que todo el personal médico hizo lo posible por salvar su vida, finalmente un paro cardiorrespiratorio terminó acabando con su existencia.
El clamor
Los padres de este joven se han acercado a las autoridades desde el primer momento para denunciar el ataque sicarial del que su hijo fue víctima, primero como herido y ahora como difunto. Les ruegan que no los dejen solos en esta situación tan dolorosa y exigen que se sigan adelantando las averiguaciones correspondientes para poder dar con el paradero de los asesinos de su ser querido y así, poder llevarlos ante la justicia.
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Pie de foto: Kevin Mateo Rodríguez, occiso.
