Rachelle Friedman Chapman, es una empresaria e instagramer que junto con su esposo, buscan romper estereotipos tras 11 años de un fatal accidente que la dejó en una silla de ruedas. Todo empezó el día que Rachelle organizó junto a sus amigas la despedida de soltera por su unión matrimonial. Ese día de la celebración, una de las amigas de la lanzó a una piscina, pero esta no tenía agua, su cabeza golpeó con el fondo de la misma y como consecuencia del fuerte impacto, terminó con un daño en su columna.
Luego de ese fatal accidente su prometido no la abandonó en medio de su largo tratamiento y difícil recuperación, todo lo contrario, veía en Rachelle a una mujer fuerte, amorosa y con quien definitivamente quería compartir su vida. Richard Chapman, esposo de la víctima, relata que tuvo que tomar la decisión de aplazar su boda para acompañarla en sus terapias de rehabilitación.
