La tranquilidad de Popayán se vio alterada por la aparición de varios pendones que generaron sospecha de contener explosivos. Sin embargo, la Policía Metropolitana confirmó que se trató de una falsa alarma y los elementos no representaban ningún peligro.
Los pendones fueron hallados en diferentes puntos de la ciudad, lo que causó alarma entre los ciudadanos y obligó a la intervención de las autoridades. Tras una inspección rigurosa por parte de la Policía y un equipo antiexplosivos, se determinó que los pendones no tenían ningún tipo de material detonante.
Las autoridades hicieron un llamado a la calma y reiteraron su compromiso con la seguridad de la ciudad. También recordaron la importancia de no difundir información falsa que pueda generar pánico en la comunidad y de siempre acudir a fuentes oficiales para verificar cualquier reporte.
