En medio de intensas operaciones militares en el departamento de Nariño, dos soldados profesionales del Ejército Nacional fueron reportados como desaparecidos tras un enfrentamiento con un grupo armado ilegal en zona rural del municipio de Cumbitara.
Los hechos ocurrieron en el corregimiento de Damasco, donde tropas del Batallón de Despliegue Rápido N.º 5, adscrito a la Fuerza de Despliegue Rápido N.º 2, desarrollaban tareas tácticas de control territorial en el marco de la operación militar Cordillera.
Durante la maniobra se registraron combates con integrantes del Grupo Armado Organizado residual (GAO-r) Estructura Franco Benavides. En medio del enfrentamiento, los soldados Brayan Estiven Ruiz Toro y Jeison García Rodríguez se extraviaron en una zona de difícil acceso y compleja geografía.
El Comando de la Tercera División del Ejército, bajo la dirección del brigadier general Javier Hernando Africano, informó que de inmediato se activaron los protocolos de búsqueda, seguridad y reacción con unidades especializadas.
Aeronaves, equipos de comunicación avanzada y tecnología de rastreo han sido desplegados en el área, con el objetivo de dar con el paradero de los militares desaparecidos. Asimismo, se adelantan coordinaciones con autoridades judiciales, entes territoriales y organismos de control para esclarecer si los soldados pudieron haber sido secuestrados por la estructura criminal.
El Ejército hizo un llamado urgente a la comunidad del corregimiento de Damasco y zonas aledañas para colaborar con información que contribuya a su localización. Se habilitó la línea 3248974902, garantizando total reserva y seguridad a quienes suministren datos. Mientras tanto, las tropas mantienen presencia activa en la región en desarrollo del Plan de Campaña Estratégico Conjunto Ayacucho Plus, que busca neutralizar a los grupos armados ilegales y proteger a la población civil. El Ejército reafirmó su compromiso con la defensa de la soberanía nacional y la seguridad de los colombianos, al tiempo que expresó su respaldo absoluto a las familias de los soldados extraviados.
Mientras tanto, continúan las labores de inteligencia y monitoreo permanente, en coordinación con organismos internacionales de derechos humanos, para asegurar que se respeten las garantías fundamentales de los soldados y de la población civil en medio del conflicto.




