En medio de una operación militar desarrollada por el Ejército Nacional, se reportó el fallecimiento del soldado profesional Sebastián Zúñiga Cerón, quien perdió la vida en la vereda Ampudia, zona rural del municipio de Jamundí, al sur del departamento del Valle del Cauca.
El hecho se presentó en las últimas horas cuando tropas pertenecientes a la Tercera Brigada adelantaban labores de control territorial en esa región, históricamente afectada por la presencia de actores armados ilegales. Según reportes oficiales, los uniformados fueron atacados por integrantes de un grupo armado organizado residual.
Durante el cruce de disparos, el soldado Zúñiga Cerón recibió varios impactos de bala que le causaron la muerte de manera inmediata. Pese a los esfuerzos de sus compañeros por prestarle primeros auxilios, el joven no logró sobrevivir.
El Comando de la Tercera Brigada del Ejército confirmó el lamentable suceso y expresó sus más sinceras condolencias a los familiares, amigos y compañeros del uniformado, quien era oriundo del departamento del Cauca. Destacaron su vocación de servicio y valentía.
A través de un comunicado, las Fuerzas Militares aseguraron que la ofensiva contra las estructuras criminales que operan en esa zona no cesará, y que continuarán desplegando tropas para garantizar la seguridad de las comunidades rurales de Jamundí.
El sector donde ocurrió el enfrentamiento es considerado estratégico para los intereses de los grupos armados, debido a su ubicación cercana a corredores utilizados para el narcotráfico y otras economías ilícitas que siguen afectando el suroccidente colombiano.
El comando militar señaló que se están adelantando investigaciones internas y judiciales para identificar plenamente a los responsables del ataque armado y lograr su captura en el menor tiempo posible.
El caso de Sebastián Zúñiga se suma a otros hechos violentos que han cobrado la vida de uniformados en esta región del país. La persistencia de actores armados ilegales continúa generando un grave riesgo tanto para la población civil como para las tropas desplegadas.
Organismos de derechos humanos y autoridades locales han insistido en la necesidad de reforzar las estrategias integrales de seguridad y estabilización, para disminuir la capacidad de acción de estos grupos ilegales que operan en zonas rurales del Valle y del Cauca.
Sebastián Zúñiga era recordado por sus allegados como un joven comprometido con la patria, quien había decidido ingresar al Ejército con la convicción de servir a Colombia. Su muerte deja un vacío en su comunidad y representa una dolorosa pérdida para sus seres queridos.
Por su parte, el Ministerio de Defensa también emitió un mensaje de solidaridad, exaltando la labor de los soldados que diariamente enfrentan riesgos en defensa de la soberanía nacional y el bienestar de las comunidades más afectadas por la violencia.
Mientras avanzan las operaciones militares en el área, la institución castrense reafirma su compromiso con el cumplimiento de la misión constitucional y la protección de los territorios donde aún persisten amenazas armadas que desafían la paz y la seguridad del país.



